dimarts, 30 de setembre del 2008

Venezuela alerta ante las denuncias de un octubre rojo

Prensa Latina

Envuelto en una activa campaña política con vistas a las elecciones regionales de noviembre próximo, Venezuela vive hoy también alerta ante denuncias de un posible ataque preparado por sectores opositores radicales para octubre.


El presidente venezolano, Hugo Chávez, advirtió ayer a la población y a los militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) sobre un posible ataque preparado por los “pitiyanquis” y la oligarquía venezolana en el mes de octubre.
Por “pitiyanquis” (imitador de estadounidenses) se conoce a los sectores opositores presuntamente vinculados a los servicios de inteligencia y la embajada de Estados Unidos, partidarios de eliminar a Chávez por cualquier medio.

La advertencia de Chávez sigue al decomiso de armas, entre ellas dos cañones portátiles, y más de una decena de detenciones de militares en activo y retirados, así como civiles, luego de la denuncia de un plan de golpe de estado y magnicidio.

El plan fue revelado a principios de mes mediante la difusión de la grabación de conversaciones entre militares complotados que analizaban la posibilidad de bombardear el Palacio Presidencial o hacer explotar el avión donde viajara el mandatario. Ante una concentración masiva de miembros el PSUV en el Poliedro de Caracas este domingo, Chávez alertó sobre la necesidad de neutralizar los planes golpistas y de la vinculación de redes de inteligencia popular con los órganos policiales.
Frente a la proyección de un “octubre rojo” en alusión a los planes violentos, el presidente venezolano convocó a celebrar un “noviembre rojo” de victoria y socialismo, con un triunfo contundente en las elecciones regionales de ese mes.

Según la evaluación de las autoridades, el plan de magnicidio fue acelerado por sectores desesperados ante el previsible triunfo de los seguidores de Chávez en las elecciones de gobernadores, alcaldes y legisladores regionales el 23 de noviembre.Al respecto, el presidente de la comisión parlamentaria que investiga el caso, Mario Isea, advirtió que el complot tiene ramificaciones internacionales con la participación de paramilitares colombianos.

Precisó que la vinculación colombiana se aprecia también en la notable actividad del ministro de Defensa de ese país, Juan Manuel Santos, y relaciones con el narcotráfico y el crimen organizado.Isea alertó que, pese a la revelación, los complotados se siguen reuniendo en Venezuela, Colombia y Estados Unidos y desplazan sus reuniones hacia Europa para tratar de burlar el seguimiento.Entre los civiles presuntamente vinculados a esos planes Isea incluye a Alberto Federico Ravell, director del canal Globovisión y al vocero del Movimiento 2D Miguel Henrique Otero, propietario del diario El Nacional, entre otros.